Artículo de Juan Angel Casado. Los Verdes de Alicante, 28-07-2011.
Pobre ladrillo, tras haber trabajado tanto, aunque también hubo cierta lujuria y desenfreno de recalificaciones, grandes proyectos quijotescos y de ruinas míticas, abusos urbanísticos, concejales de Urbanismo pasando por los Juzgados, aeroentuertos construidos y como ejemplo, el consistorio de la Banda de Gil, celebérrimo con grandes orgías administrativo-prevaricadoras de recalificación y vaciamiento patrimonial con todo tipo de empresas mercantiles,¡Barra libre¡ dieciseis años robando, cinco para ir a juicio, y falta la apelación.¡Qué gran control¡ Para destripar Marbella hizo falta una actuación policial del tipo “antimafia”, ¿ Y que no ha pasado en otros municipios, que tenían los mismos tipos de control interno y externo?
El control de la legalidad de Marbella es la guinda de un pastel del descontrol, no sólo se han aflojado los controles municipales, sino los constitucionales con el retraso de lustros en nombrar a los miembros del CGPJ en tiempos del PP y con el PSOE los retrasos en nombrar a Magistrados en tiempos del Tribunal Constitucional, y por supuesto los controles se aflojan a nivel autonómico, las mayorías bloquean las comisiones para investigar sus escandalos y las preguntas por dichos escandalos, se crean empresas publicas para dar más opacidad a las cuentas publicas.
Si los dos grandes partidos políticos y otros, son las columnas del sistema político, y en lo profundo, sus vacas sagradas son su financiacion para ganar elecciones, la leche podría ser las comsiones urbanísticas, del que se oyó hablar claramente tanto al Sr. Zaplana, entre otros, en las conversaciones judiciales anuladas del Caso Naseiro en 1989, como en 1981 al Concejal del PSOE, Alonso Puerta que fue expulsado tras decir que no era ético cobrarlas. En la lógica indicada, si un Juez como Garzón se le ocurre investigar “las vacas sagradas”, la financiación de un partido, como en Gürtel se considera esto una herejía y lo normal es que se le queme en la hoguera según nuestra gran tradición inquisitorial. En lógica económico-política: Si recibo más comisiones ganaré más elecciones, si bajo los controles, puedo construir y recalificar más, si el partido se lleva dinero, también me lo llevo yo o el funcionario que ayuda, si no hay dinero para construir, se pide prestado a bancos y cajas, cajas controladas por los partidos politicos, si ellos no lo tienen, nuestras cajas y bancos los piden a bancos extranjeros, éstos, a su vez, como los alemanes, han especulado con “fondos estructurados de hipotecas”(basuras) de cierto banco que se arruinó y al caer éste, como el dominó al caer, van cayendo todo lo mal construido y nos quedamos con deudas con un terreno hipotecado inproductivo llamado “recalificado”. El refrán ha cambiado: los bancos y cajas están enladrillados ¿Quien los desenladrillará? El desenladrillador que los desenladrille, buen desenladrillador será. Pero ¿Y si los mismos enladrilladores nos dicen que son los buenos desenladrilladores?
Ahora el pobre ladrillo, tras tantas relaciones, practicas de riesgo, infecciones, es decir la gran bacanal bajo la influencia de sustencias potenciadoras muy edificantes en la que partipabamos todos, está embarazado de millones de chalets, urbanizaciones, pisos y terrenos recalificados y “se encuentra en la calle, sin rumbo, perdido y en el lodo”, hay algunos que quieren seguir engañandonos con eso de “ si tu me dices vente un rato al banco con Rato, lo dejo todo”, otros del PSOE empiezan a echar la culpa a los bancos pero la cruda realidad es “si te he visto no me acuerdo” para el ladrillo y para el ciudadano que ha trabajado honradamente.