Por José Manuel Dolón, Coordinador Comarcal de Los Verdes de la Vega Baja del Segura y Concejal en el Ayuntamiento de Torrevieja.
He leído con gran sorpresa el duro posicionamiento del President Fabra sobre la fracasada moción de censura promovida en Orihuela por su partido y por dos concejales del CLR, habiéndome extrañado, por su firmeza y contundencia, el anuncio de que la denunciará en los tribunales, por considerar que ha existido prevaricación en la decisión de los componentes de la Mesa de Edad de no permitir que la misma se votara, dada la condición de no adscritos de dos de los concejales que iban a participar en dicha votación.
Y me ha sorprendido, sobre todo, por la tibieza que el President Fabra viene teniendo frente a los muchos escándalos de corrupción que identifican la gestión del PP en la Comunidad Valenciana, por su condescendencia con los numerosos cargos públicos de su partido que en la actualidad se encuentran imputados, procesados e incluso condenados, y, también, por cuando se muestra tan desinteresado y tranquilo ante hechos tan graves y luctuosos como el accidente del Metro de Valencia, el brutal recorte en prestaciones y derechos a dependientes, pensionistas y trabajadores, el aumento de la precariedad y de la pobreza o el cierre de RTVV, por citar sólo algunos de los hechos y acontecimientos que durante los últimos años han marcado la gestión de su partido y ahora de su gobierno.
Posiblemente, para el President Fabra, el municipio de Orihuela sea mucho más importante que todos los marrones que tiene sobre la mesa o vaya a tener en el futuro y, ya que cuando va a Madrid no se atreve a reclamar la deuda histórica de los valencianos o a exigir en voz alta y con la mayor contundencia una financiación justa que de una vez por todas acabe con la discriminación a la que ha estado sometida la Comunitat, amenaza, ahora, con presentar denuncias y llevar a los tribunales a los responsables de haber impedido que el gobierno municipal de Orihuela se convirtiera en un refugio de imputados y no adscritos, milagrosamente juntos y unidos por el vínculo sagrado del compromiso por la privatización de las basuras.
Orihuela sigue siendo la capital política de la Comarca de la Vega Siciliana, aunque Torrevieja le haya estado disputando durante los últimos años ese mafioso privilegio, y ese podría ser el único motivo por el que el President Fabra tiene tanto interés en recuperar el gobierno de tan histórica ciudad, aunque desde mi humilde opinión, si tan interesado está en que se persiga y castigue el delito de prevaricación, no hace falta que se venga tan al sur ya que seguro que tiene cientos de ejemplos e incluso mucho más graves en otros municipios y ayuntamientos valencianos.
Mientras tanto, estaremos atentos para ver cómo queda el escándalo del saqueo del caso Cooperación: a ver que tal les va a Blasco y al resto de los funcionarios y personajes implicados.